-LIBÉRATE DE TU MENTE:

Empieza por escuchar la VOZ que habla dentro de tu cabeza. NO JUZGUES ni condenes lo que oyes. Pronto te darás cuenta que la voz está allí y tú estás aquí observándola. Esta comprensión surge de más allá de la mente.

En lugar de “observar al pensador” también puedes crear una apertura en la corriente mental por el simple hecho de dirigir tu foco de pensamiento al ahora, haciéndote intensamente consciente del momento presente.

Hay un criterio que te permite medir el éxito logrado en esta práctica: el grado de paz que sientas en tu interior.

-EMOCIÓN Y MIEDO:

Si existe un conflicto aparente entre pensamiento y emoción, el PENSAMIENTO es el que MIENTE y la EMOCIÓN DICE LA VERDAD . No la verdad última de tu identidad real, sino la verdad relativa de tu estado mental en ese momento.

La emoción es la reacción del cuerpo a la mente. El cuerpo recibe mensajes de peligro por parte del ego. Este mensaje genera una emoción de miedo.

-ABANDONA EL TIEMPO PSICOLÓGICO:

Si te centras excesivamente en el objetivo , quizás porque estás buscando la felicidad, la realización o completar tu sentimiento de identidad, dejas de honrar el ahora. Entonces se queda reducido a un simple paso intermedio sin valor intrínseco que te permite acceder al futuro. El tiempo del reloj se convierte en tiempo psicológico. Tu CAMINO DE VIDA deja de ser una AVENTURA y se reduce a una necesidad obsesiva de llegar, de alcanzar, de “ lograrlo “.

¿Estás siempre tratando de llegar a otro lugar distinto del que estás?

¿Son la mayoría de tus acciones sólo un medio para llegar a un fin?

¿Pospones siempre la satisfacción o la reduces a breves placeres como el sexo, la comida, la bebida, las drogas o las emociones intensas y la excitación?

¿Estás siempre centrado en conseguir, alcanzar o llegar a ser, o alternativamente, estás siempre buscando una nueva emoción o placer?

¿Crees que si adquieres más cosas te sentirás más realizado , serás lo suficientemente bueno o estarás psicológicamente completo?

¿Esperas que un hombre o una mujer dé sentido a tu vida?

-TODOS LOS PROBLEMAS SON ILUSIONES MENTALES:

Cuando creas un problema , creas un dolor. Basta con hacer una simple elección, con tomar una SIMPLE DECISIÓN: pase lo que pase, no generaré más dolor para mí mismo. No me crearé más problemas.

Aunque es una elección muy simple, es también muy radical. No podrás tomar esa decisión a menos que estés realmente muy harto de sufrir y consideres que ya has tenido suficiente. Pero tampoco podrás mantenerla a menos que hayas accedido al poder del ahora.

Cuando esperas estás creando un conflicto inconsciente entre tu aquí y ahora - el lugar donde no quieres estar – y el futuro proyectado – el lugar donde quieres estar - .Esto reduce mucho tu calidad de vida, obligándote a perder el presente.

La verdadera prosperidad es sentirse agradecido por el momento presente y por la plenitud de la vida ahora mismo .

-DEJA QUE LA RESPIRACIÓN TE LLEVE AL CUERPO:

Sigue la respiración con tu atención, el aire que entra y sale del cuerpo. Inspira y siente el abdomen expandirse y contraerse ligeramente con cada inspiración y expiración.

Si te resulta fácil visualizar, cierra los ojos y obsérvate rodeado de luz o inmerso en una sustancia luminosa, en un mar de conciencia. A continuación inspira esa luz. Siente que la sustancia resplandeciente llena todo tu cuerpo y lo hace luminoso.

A partir de ahí, gradualmente, céntrate más en la sensación. No te apegues a ninguna imagen visual. Ahora estás en tu cuerpo. Has accedido al poder del ahora.

-DISOLVER EL CUERPO-DOLOR:

Busca cualquier señal de infelicidad en ti, del tipo que sea. El cuerpo-dolor, como cualquier otra entidad existente, quiere sobrevivir y se alimentará de cualquier experiencia que resuene con su energía característica, algo que produzca dolor del modo que sea: ira, ganas de destruir, odio, pena, drama emocional, violencia e incluso enfermedad. Cuando se ha apropiado de ti el cuerpo –dolor crea en tu vida una situación que refleje su propia frecuencia energética para poder alimentarse de ella.

En cuanto el dolor se apropia de ti, quieres más dolor. Te conviertes en una víctima o en agresor. Quieres causar dolor o sufrirlo o las dos cosas. Como no eres consciente de lo que haces, afirmarás vehementemente que no quieres sufrir. Pero si miras de cerca, verás que tu forma de comportarte y tu forma de pensar están diseñadas para perpetuar el dolor, tanto para ti mismo como para los demás.

Si no afrontas el dolor, te verás obligado a revivirlo una y otra vez.

El cuerpo - dolor puede parecerte un monstruo peligroso que no te atreves a mirar, pero te aseguro que es un fantasma insustancial incapaz de prevalecer ante el poder de tu presencia.

Cuando te conviertes en OBSERVADOR y aceptas que el dolor está ahí, no lo juzgas y empiezas a dejar de identificarte, el cuerpo dolor sigue operando durante cierto tiempo e intenta engañarte para que vuelvas a identificarte con él, tiene cierta inercia…….pero no durará.

No olvides que cuando tu pensamiento se alinea con el campo energético de tu cuerpo- dolor, te identificas con él y vuelves a alimentarlo con tus pensamientos.

Ser “ inconsciente “. Tal como uso la palabra aquí, significa identificarse con algún patrón emocional o mental. Implica ausencia total del observador.

La ATENCIÓN CONSCIENTE SOSTENIDA corta el vínculo entre el cuerpo-dolor y el proceso de pensamiento y pon en marcha el proceso de transmutación de sufrimiento en conciencia. Es como si el dolor se convirtiera en COMBUSTIBLE para la llama de tu conciencia.

Aunque el proceso es muy poderoso, pero también muy simple, puedes hallar intensas resistencias internas a soltar la identificación con tu dolor.

Ello ocurrirá particularmente si has vivido muy identificado con tu cuerpo-dolor durante casi toda tu vida y te has fabricado un yo infeliz y te identificas con esa ficción mental. En tal caso, el miedo inconsciente a perder tu identidad creará una fuerte resistencia a cualquier desidentificación. PREFERIRÁS SENTIR DOLOR QUE DAR UN SALTO A LO DESCONOCIDO y arriesgarte a perder tu identidad desgraciada.

Observa el apego a tu dolor. Observa el peculiar placer que te proporciona ser infeliz. Observa la tendencia compulsiva a hablar o a pensar en tu desdicha. La resistencia cesará si la haces consciente.

Del mismo modo que no puedes luchar contra la oscuridad, tampoco puedes luchar contra el cuerpo –dolor. Si lo intentaras crearías más conflicto interno y prolongarías el dolor. Basta con observarlo que implica aceptarlo como parte de lo que es en este momento.

-DE LAS RELACIONES ADICTIVAS A LAS RELACIONES ILUMINADAS:

A menos que accedas a la frecuencia consciente de la presencia, todas las relaciones, y en particular las relaciones íntimas, acabarán fracasando y siendo disfuncionales. Puede que parezcan perfectas durante un tiempo, mientras estás “enamorado”, pero esa perfección se altera invariablemente a medida que van produciéndose , conflictos, discusiones, insatisfacciones y violencia emocional o incluso física…., momentos de tensión que suceden con creciente frecuencia.

Todas las ADICCIONES surgen de una negativa inconsciente a encarar y traspasar el propio dolor. Todas las adicciones empiezan con dolor y terminan con dolor. Cualquiera que sea la sustancia que origina la adicción_ alcohol, comida, drogas o una persona_, estás usando a algo o a alguien para encubrir tu dolor.

Por eso hay tanto dolor e infelicidad en las RELACIONES ÍNTIMAS en cuanto pasa la primera euforia. Las relaciones mismas no son la causa del dolor y de la infelicidad, sino que SACAN A LA SUPERFICIE EL DOLOR Y LA INFELICIDAD QUE YA ESTAN EN TI. Todas las adicciones lo hacen. Llega el momento en que la adicción deja de funcionar y sientes el dolor con más intensidad que nunca.

Desidentificarse del cuerpo-dolor es llevar la presencia al dolor y así transmutarlo.

Si dejas de investirla de “yoidad”, la mente pierde su cualidad compulsiva, formada básicamente por la constante tendencia a juzgar y a resistirse a lo que es, creando así conflicto, drama y más dolor. De hecho, en el momento en que dejas de juzgar y aceptas lo que es , eres libre de la mente. Has creado espacio para el amor, para la alegría, para la paz.

Primero dejas de juzgarte a ti mismo; después dejas de juzgar a tu pareja. El mayor catalizador del cambio en las relaciones es la aceptación total de tu pareja tal como es, dejando completamente de juzgarla y de intentar cambiarla. Eso te lleva inmediatamente más allá del ego. A partir de entonces todos los JUEGOS MENTALES y el APEGO ADICTIVO SE ACABAN. Ya NO HAY VÍCTIMAS NI VERDUGOS, ni acusadores ni acusados.

El amor es un estado de ser. TU AMOR NO ESTÁ FUERA; está en lo profundo de ti. Nunca puedes perderlo, NO PUEDE DEJARTE. No depende de otro cuerpo, de otra forma externa.

El reconocimiento y la aceptación de los hechos permite cierta libertad respecto a ellos.

No hay nada que puedas hacer respecto de tu transformación interna. No puedes transformarte a ti mismo y, no puedes transformar a tu pareja, ni a ninguna otra persona. Lo único que puedes hacer es crear un ESPACIO para que ocurra la transformación, para que entren la gracia y el amor en tu vida.

Cuando veas que tu relación no funciona, cuando haga asomar tu” locura” y la de tu pareja, alégrate. Lo que era inconsciente está saliendo a la luz. ES UNA OPORTUNIDAD DE SALVACIÓN.

REGISTRA tu estado interno en cada momento. Si estás enfadado debes saber que estás enfadado. Si te sientes celoso, si estás a la defensiva, si sientes el impulso de discutir, la necesidad de tener razón, si tu niño interno pide amor y atención o si sientes dolor emocional del tipo que sea, conoce la realidad de ese momento y registra ese conocimiento.

Entonces tu relación se convierte en tu SADHANA, tu práctica espiritual. Si observas un comportamiento inconsciente de tu pareja, rodéalo con el abrazo amoroso de tu conocimiento y NO REACCIONES. Si reaccionas tú mismo caes en la inconsciencia.

Si los dos llegáis al acuerdo de que la relación va a ser vuestra práctica espiritual, tanto mejor. Entonces podréis expresar vuestros pensamientos sentimientos o reacciones en cuanto se produzcan, sin crear desfase temporal.

Es vital dar espacio a los demás y también dártelo a ti mismo. El amor no puede florecer sin espacio.

SI NO PUEDES SENTIRTE A GUSTO CUANDO ESTÁS SOLO, buscarás una relación para remediar tu inquietud. Puedes estar seguro de que la incomodidad reaparecerá bajo otra forma dentro de la relación, y probablemente pensarás que tu pareja es responsable de ello.

- ACEPTACIÓN Y RENDICIÓN:

Cuando desaparece la DEPENDENCIA, desaparece también el miedo a la pérdida. La vida fluye con tranquilidad.

La negatividad va desde la irritación o la impaciencia hasta la ira encendida, desde el estado de depresión anímica o resentimiento hasta la desesperación suicida.

Cuando estás identificado con una emoción negativa no quieres soltarla, y en algún profundo nivel inconsciente no deseas un cambio para mejor porque pondría en peligro tu identidad de persona deprimida, enfadada o maltratada. Entonces ignorarás o sabotearás lo positivo de tu vida. Este es un fenómeno bastante común. Y una locura.

Siéntete como si te estuvieses volviendo transparente. Deja que todo te atraviese. Imagina que alguien te dice algo grosero o con intención de molestarte. En lugar de caer en la reacción inconsciente y en la negatividad, en lugar de atacar, ponerte a la defensiva o retirarte, DEJA QUE LAS PALABRAS TE ATRAVIESEN LÍMPIAMENTE. No ofrezcas resistencia. Es como si ya no hubiera nadie que pudiera sentirse herido. Eso es perdón. Así es como te vuelves INVULNERABLE.

No busques la paz. No busques ningún estado diferente del que tienes, así no producirás conflicto interno ni resistencias inconscientes.

PERDÓNATE por no estar en paz. En el momento en que aceptas completamente tu falta de paz, la no-paz se transforma en paz. Éste es el milagro de la rendición.

Cuando aceptas lo que es, cada momento es el mejor. Eso es la iluminación.

La compasión es la conciencia del vínculo profundo que te une a todas las criaturas.

Una de las prácticas espirituales más poderosas es la de meditar profundamente en la mortalidad: “ morir antes de morir”. Nada real ha muerto jamás; sólo los nombres , las formas y las ilusiones.

En este nivel profundo, la compasión se convierte en sanación en su sentido más amplio En este estado, tu influencia sanadora no se basa fundamentalmente en el hacer, sino en el ser. Todas las personas con las que entres en contacto se sentirán tocadas por tu presencia y afectadas por la paz que emanas, seas consciente de ello o no.

RENDIRTE es lo más importante que puedes hacer para provocar un CAMBIO positivo. Rendirse es aceptar el momento presente incondicionalmente y sin reservas. Es renunciar a la resistencia interna a lo que es.

Resistirse internamente es decir “no “ a lo que es, mediante el juicio mental y la negatividad emocional.

La aceptación de lo que es te libera inmediatamente de tu identificación mental y vuelve a conectarte con el Ser. La resistencia es la mente.

La rendición es un fenómeno puramente interno, que no implica que en lo externo no puedas emprender acciones para cambiar la situación. Para rendirte no tienes que aceptar la situación general, sino sólo el pequeño segmento llamado ahora.

Resignación no es rendición. NO TIENES QUE ACEPTAR UNA SITUACIÓN DE VIDA DESAGRADABLE O INDESEABLE. Tampoco tienes que engañarte y decirte que no tiene nada de malo. No. Reconoces plenamente que quieres salir de ella y entonces limitas tu atención al momento presente sin ponerle ninguna etiqueta mental. Eso significa que NO HAY JUICIO sobre el ahora y no hay resistencia ni negatividad emocional. Aceptas el momento tal como es. Después te pones en acción y haces todo lo posible por salir de la situación.

No sólo tu forma psicológica , sino también tu forma física, tu cuerpo, se endurece y se pone rígido a causa de la resistencia. Surge tensión en distintas partes del cuerpo y éste en su totalidad se contrae.

En el estado de rendición, VES CON CLARIDAD LO QUE HAY QUE HACER Y EMPIEZAS A ACTUAR vas haciendo y te centras en una cosa cada vez.

No confundas la rendición con una actitud de “ya nada me puede molestar” o “las cosas ya no me importan”. No es rendición, sino resistencia enmascarada.

La rendición hará que tus relaciones cambien profundamente. Si no puedes aceptar lo que es, eso implica que nunca puedes aceptar a las personas como son. Las juzgarás, las criticarás, las etiquetarás, las rechazarás o intentará cambiarlas.

Si te sientes de repente muy ligero, diáfano y en profunda paz, eso es una señal inequívoca de que te has rendido realmente. Observa entonces lo que le ocurre a la posición mental de la otra persona cuando dejas de energizarla mediante la resistencia. Cuando la identificación con las posiciones mentales se deja de lado, COMIENZA LA VERDADERA COMUNICACIÓN.

No resistirse no significa necesariamente no hacer nada. Cede para vencer.

Cuando te rindes, ya no necesitas las máscaras del ego ni sus defensas. Te vuelves muy simple, muy real. “Eso es peligroso”, dice el ego. “Te sentirás herido. Serás muy vulnerable”. Lo que el ego no sabe, es que sólo ABANDONANDO LA RESISTENCIA, haciéndote” vulnerable”, puedes descubrir tu verdadera y esencial INVULNERAVILIDAD.

-TRANSFORMAR LA ENFERMEDAD Y EL SUFRIMIENTO:

Podría parecer que la situación está creando el sufrimiento, pero en último término no es así: la responsable es tu resistencia.

Esta es tu segunda oportunidad de rendirte: Si no puedes aceptar lo de fuera, entonces acepta lo de dentro, tu situación interna.

Esto significa: NO TE RESISTAS AL DOLOR. Permítelo. Ríndete al dolor, a la desesperación, al miedo, a la soledad o a cualquier forma que adopte el sufrimiento. Obsérvalo sin etiquetarlo mentalmente. Abrázalo.

A continuación observa cómo el milagro de la rendición transmuta el sufrimiento profundo en paz profunda. Ésta es tu crucifixión. Deja que se convierta también en TU RESURRECCIÓN y ascensión.

Atraes y manifiestas lo que corresponde a tu ESTADO INTERNO.

La aceptación del sufrimiento es un viaje hacia la muerte. Afrontar el dolor profundo, dejarlo ser, poner tu atención en él, es entrar en la muerte conscientemente. Cuando hayas muerto esa muerte, te darás cuenta de que no hay muerte y no hay nada que temer. SÓLO MUERE EL EGO.

El camino de la cruz es el antiguo camino hacia la iluminación y requiere una inversión completa. Significa que la peor cosa de tu vida, tu cruz, se convierte en lo mejor que te ha ocurrido, porque te obliga a rendirte, a “morir”, te fuerza a convertirte en nada, a ser como Dios, porque también Dios es una no-cosa, una nada. Pero el dolor puede prolongarse mucho tiempo.

Pero puedes elegir la iluminación conscientemente, eso significa renunciar al pasado y al futuro y hacer del ahora el foco principal de tu vida.

¿ CUÁNTO TIEMPO MÁS CREES QUE NECESITAS ANTES DE PODER DECIR :” Ya no crearé más dolor, ni más sufrimiento? “ ¿ CUÁNTO DOLOR MÁS NECESITAS ANTES DE PODER TOMAR ESA DECISIÓN?

Si crees que hace falta más tiempo lo tendrás y también tendrás más dolor.

NO PUEDES PERDONARTE VERDADERAMENTE ni perdonar a los demás mientras extraigas del pasado tu sentido de identidad. Sólo accediendo al poder del ahora, QUE ES TU PROPIO PODER, PUEDE HABER UN VERDADERO PERDÓN. Esto quita poder al pasado, y te das cuenta realmente de que NADA DE LO QUE HICISTE, o de lo que SE TE HIZO, podía dañar en lo más mínimo la RADIANTE ESENCIA que eres.

ECKHART TOLLE